¡¿Qué hago en Malasia?!
"Lamentamos los inconvenientes pero vamos a pasar a desinfectar el avión, les recomendamos cubrirse el rostro mientras los asistentes de vuelo los rocían". No había ni aterrizado y ya tenía mi primer shock cultural. Había escuchado muchos avisos antes de aterrizar como “no se desabroche el cinturón hasta que la señal se apague” o “prohibido el uso de aparatos electrónicos en migración”, pero lo vamos a rociar con desinfectante definitivamente no. Eso me hizo preguntarme una vez más qué demonios hacía en Malasia. Para alguien que teme a una lagartija más que a un ladrón, ir a un lugar que lo promocionan como “el destino soñado para los amantes de la biodiversidad, las plantas carnívoras y los animales exóticos”, la decisión tenía todo menos sentido. Pero creo que en la vida y en los viajes hay que hacer caso al instinto, a esa vocecita interna que te anima a que [...]